Dios nos dió hijos

Publicado por Igor Cabrera

Tres años habíamos intentado sin éxito tener un hijo. Mi esposa ya había perdido las esperanzas pero yo conocía del poder de Dios y no dejaba de rogarle.

Era un domingo de diciembre del año 2001, decidimos no ir a nuestra congregación sino visitar una pequeña iglesia que había cerca de casa. Era nuestra primera visita a ese lugar y coincidió con la visita de un predicador argentino. El predicador empezó la prédica que trataba sobre la oveja perdida y de pronto en medio del sermón se detuvo luego de estar en silencio por un rato me señaló con el dedo y me dijo:

-Vos, vení acá

-¿Yo? –pregunté sorprendido

-Sí, vos, el Señor dice que te va a dar lo que le estás pidiendo, ¿Qué le has pedido?

-Mi esposa y yo hemos estado pidiendo un hijo

Pidió que mi esposa y yo pasáramos al frente y lo hicimos, oró y sopló sobre el estómago de mi esposa y yo me caí en el piso.

La semana siguiente recibí en mail de Alfredo Liébano, a quien no conocía hasta entonces diciendo ‘El Señor quiere darte lo que le estás pidiendo’, respondí con una breve nota ‘¿Qué le estoy pidiendo?’ a lo que Alfredo contestó ‘No sé, sólo sentí que debía escribirte esto’, Alfredo y yo somos amigos desde entonces.

Llegaron las fiestas de fin de año y el 2 de enero visitamos de sorpresa a mi hermana, quien estaba yendo donde su suegra justo cuando llegamos, nos invitó a acompañarla y a pesar que no conocíamos ni a su suegra ni a la familia de ésta accedimos, estando allí ‘Piquin’ ,uno de los hijos de la dueña de casa se me acercó, después de orar, y me dijo -‘El Señor dice que este año recibirás lo que le estás pidiendo’- , siendo la tercera vez que escuchaba esta misma promesa sonreí y repetí la pregunta que le hice a Alfredo, -´¿qué le estoy pidiendo?´ a lo que él contestó no sé y se marchó, pero habiendo caminado unos pasos se volvió y me dijo: ‘Y va a ser varón’. Hasta hoy se me llenan los ojos de lágrimas al recordarlo.

Poco a poco la esperanza de un bebé renació en mi esposa y ese año soñó con dos hijos que habríamos de tener. En mayo de ese año al regresar de un viaje la camioneta en la que veníamos se volcó, hizo una triple vuelta campana, y a pesar de eso todos los tripulantes salimos ilesos, sin embargo nos trasladaron a una clínica, el médico que revisó a mi esposa le preguntó -¿usted está embarazada?’ , la pregunta parecería rutinaria pero fue la única de las tres mujeres que se accidentaron a la que le preguntaron eso, así que Neicy quedó con la duda, al día siguiente se hizo el test y estaba con seis semanas de embarazo. Unos meses más tarde nacía Josué, el hijo de la promesa cuyo nombre quiere decir ‘Dios Salva’

Hoy tenemos dos hijos bellos y muy bendecidos.

1 comentarios:

  1. vanessa dijo...

    QUE BUENO QUE DIOS LE BRINDO LA BENDICION DE UN HIJO PUES YO ME ENCUENTRO EN UNA SITUACION SIMILAR PERO COMO DIOS TODO LO PUEDE Y EL NO MIENTE YO SE QUE EL CUMPLIRA SU PROMESA EN SU TIEMPO ; PUES LOS HIJOS SON EL AMOR VERDADERO DE DIOS HACIA TODOS NOSOTROS